lunes, 26 de enero de 2015

SALUD Y ENFERMEDAD PETAR DENOV (1864 – 1944)

SALUD Y ENFERMEDAD
PETAR DENOV (1864 – 1944)
 

La vida es la esencia del cuerpo humano, la esencia de la vida es la salud, y la salud es el resultado de la relación armónica de elementos y fuerzas que trabajan en el organismo.

La salud de la persona depende de cuatro condiciones: el poder de su espíritu, la bondad de su alma, la luz de su mente y la ternura de su corazón.

Para adquirirlas, tiene que conseguir conocimiento.
Estar sano significa estar en armonía con el Principio Primordial, con tus allegados y contigo mismo.
¿Cuál es el origen de la enfermedad? Una de las causas es la acumulación de energía sobrante en zonas de desechos. Para liberar el exceso de energía, antes tienes que descubrir la causa de su acumulación. Cuando sabes el motivo, resulta fácil liberar esta energía. El motivo puede deberse a una mala combinación de pensamientos. Corrige el proceso de pensar y el dolor desaparecerá.

La más pequeña desarmonía entre tus pensamientos, sentimientos y acciones, te lleva a la enfermedad. Para armonizarlos, debes estar en sintonía con las leyes de la Naturaleza. Si consigues alinearlos, tus pensamientos, sentimientos y acciones fluirán con naturalidad, con suavidad y con el mismo esfuerzo que te supone el respirar o el recibir luz.

¿Qué es la enfermedad? Materia en desorden, energía desordenada, pensamientos desordenados.
Cuando caigas enfermo, no te asustes, pero infunde amor en tu vida. El amor cura todas las enfermedades. Considera la enfermedad positivamente. Contémplala como un regalo que te ha sido dado para que trabajes sobre ti mismo. Cuando el discípulo está enfermo, tiene que desarrollar su amor. Cuando su amor aumente, se curará.

Detrás de cada enfermedad hay entidades ocultas, en diferentes estados de desarrollo, fuertes o débiles, buenas o malas. La mayoría de ellas son malas. Estas entidades invisibles agitan y usurpan las energías humanas. Cuando una persona está enojada, se llevan sus energías y le dejan en un estado de

Debilidad. He sido testigo de cómo sucede. Llegan en grupo, toman sus posiciones en torno a la persona y le sugieren pensamientos negativos.
Cuando han conseguido su propósito, se marchan y observan el resultado.
Cualquier clase de enfermedad que aparezca en el ser humano, es debida a sus pensamientos. Cada pensamiento negativo conlleva un estado negativo. Todo mal pensamiento o sentimiento atrae varias entidades inferiores.

Todas las enfermedades que aparecen en el plano físico, han surgido primero en el mundo espiritual antes de alcanzar el plano físico. Si tienes éxito en crear el polo opuesto de la idea que ha provocado la enfermedad, verás como ésta desaparece dos o tres meses más tarde.

El pensamiento humano penetra el espacio intermolecular del sistema nervioso cerebral, y sus sentimientos, el espacio internuclear del sistema nervioso simpático. Ésta es la principal diferencia entre pensamientos y sentimientos. Por ello, para proteger a la persona de las destructivas influencias de las fuerzas ocultas en los espacios intermolecular e internuclear, la ciencia oculta da el siguiente consejo: “No descuides tus elevadas aspiraciones y deseos, no eches en olvido tus altos pensamientos.”

¿Cuál es la razón por la que hay enfermedades? El bloqueo de energía vital en los casos en que se vuelve potencial o pasiva. Por eso, el procedimiento curativo consiste en la transformación de la energía potencial en energía kinética. Ello puede conseguirse mediante la aplicación de diferentes clases de remedios y métodos que activan la energía pasiva.

Hay siete u ocho maneras de curar a una persona. Sólo en muy pocos casos la persona puede ser curada espiritualmente.
¿En qué casos? Únicamente las personas que no dudan de si mismas pueden curarse de esta manera.

En el proceso curatorio participan tres factores: la naturaleza, el sanador y el mismo paciente.
La naturaleza participa en un 50%, el sanador en un 25%, y el paciente en el restante 25%. Sin embargo, el resultado depende principalmente del paciente. Si no toma una actitud activa, la ayuda de la naturaleza y del sanador será inútil.

Los doctores de hoy día estudian los signos y síntomas de las enfermedades. De hecho, un verdadero doctor necesita conocer primeramente las características y comportamientos de un organismo sano para compararlos con los de uno enfermo. No se es un maestro por diagnosticar a una persona enferma.
Lo que sí constituye una habilidad es diagnosticar con una antelación mínima de diez años al comienzo de la enfermedad a fin de poder prevenirla. Es más fácil curar a alguien antes de que se produzca la enfermedad, que después que ésta se haya establecido. El sanador que conoce la ciencia oculta está capacitado para obrar de esta manera.

Muchas enfermedades se deben al estado de otras personas y se contagian por sugestión. Sabiendo esto, trabaja conscientemente sobre ti mismo a fin de no ser afectado por influencias externas. Ayuda a tus allegados a liberarse de las malas influencias y sugestiones que reciban inconscientemente.
Los ojos de ciertas personas despiden unas radiaciones especiales utilizables para bien o para mal. Esos ojos pueden transmitir aflicciones o bendiciones a los que están en su entorno.

No hay veneno tan poderoso como los pensamientos y sentimientos negativos. El temor, el odio, la suspicacia, la duda, son diferentes clases de venenos. Se depositan en la sangre y la emponzoñan.

No hagas componendas con tu pureza, porque cuando eres puro permites que todas las fuerzas de vida circulen libremente. Primeramente, debes limpiar tu sangre. No puedes limpiarla si no has limpiado tus pensamientos, sentimientos y acciones. Al igual que limpias tu sangre mediante la respiración, debes encontrar la manera de purificar tus pensamientos.

Para equilibrar corazón y mente se precisa del amor. También se necesita de la Mente Divina. Toda enfermedad está causada por insuficiente luz en la mente, insuficiente calor en el corazón e insuficiente energía en el organismo. Cuando la luz, el calor y la energía aumentan, la salud mejora en consonancia.


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